Categorías
Unaporuna

Operación Bodas: QUERER, QUERER…

Hoy le cojo prestado el texto a Isa de su maravilloso blog, y lo comparto con vosotros.

Porque por encima de todos los preparativos y detalles que hay en una boda, lo más importante es eso…Querer, y mucho!

Qué bonitas son las bodas! ¡Todo tan mono! Las flores, las invitaciones, los adornos, el vestido, el Candy bar, los detallitos…. ¡buufff! ¡Tantas cosas!

¡La verdad es que se nos va un poco la pinza! Sobre todo a nosotras.
Es un día muy especial, quizás el más importante de nuestra vida. Y precisamente por eso hay que cuidarlo mucho.
Soy de la opinión de que hay que celebrarlo todo y por todo lo alto. Cualquier cosa es motivo de brindis, de hacer una pachanga o un banquete. Me encantan las fiestas y que todo esté cuidado con esmero y con mil pijaditas ideales. Pero no tendría sentido hacer una cena  y preocuparnos de poner una bonita vajilla, un centro de mesa chulísimo y un buen mantel y luego hacer una caca de cena. Nos centramos en hacer un buen menú y luego lo adornamos con todos los detalles.
Con la boda pasa lo mismo. Es una etapa que puede unir mucho. Preocuparnos por conocernos bien, hablar de lo que esperamos el uno del otro, qué ideales tenemos, qué nos preocupa, nuestros miedos e ilusiones, planes de futuro, nuestras manías…¡¡qué luego vienen los sustos!!
Nos centramos tanto en vestirnos, que nos olvidamos de lavarnos la cara. Y luego claro…el maromo deja los calcetines tirados debajo de la cama y ¡le mando a freír espárragos!
Cuando me casé, nadie me dijo que él iba a dejar todos los días los zapatos atravesados por la habitación y que cada vez que me levantase al baño por la noche me iba a tropezar y darme un coscorrón con la puerta. Tampoco sabía que habla por las noches y parece paranoico y tantas cosas que no aguanto. Pues habrá que aguantar, porque yo tengo mis cosas. Él tampoco sabía que ronco como un oso hibernando, y que antes de acostarme me restrallo los dedos y da igual que me lo diga 1.000 veces, lo voy a seguir haciendo, porque no puedo evitarlo, y va en mi cuadro genético.
O resulta, que luego hablando,te dice que no quiere tener hijos y tú si quieres; o que no es tan cariñoso como creías; o que es un desordenado o un cagaprisas… ¿y tú? ¿No tienes defectos?
Las cosas hay que hablarlas, hablar, hablar… y discutir ¡que es normal! Si no discutes es porque no dialogas. Y si no, va chispeando, chispeando, hasta que un día la chispa prende, nos sale humo por las orejas y salta la alarma de incendios. Y al final nos dejamos de hablar porque el domingo había siete pares de calcetines debajo de la cama.
Está claro que hay que QUERER QUERER. 
Es muy sencillo querer a alguien cuando todo marcha sobre ruedas, cuando está guapo, sano o de buen humor pero, cuando está hecho una piltrafa, calvo o potando porque cogió un virus y da un asco que te mueres; o resulta que tiene problemas gastrointestinales y se le escapa algún pedo… Esto es muy duro, pero el matrimonio a veces huele mal.
O cuando llega a casa de mal humor porque está cansado y además tú también, y mira, “es que no aguanto al paisano”.
Una vez una amiga me decía que iba a dejar a su chico porque ya no sentía maripositas como cuando le conoció. ¡Chica, tienes un hígado y no lo sientes!
Yo con mis hijos tengo instintos asesinos, espero que no me quiten la custodia por esto. Pero cuando me la lían me dan ganas de matarlos. Y no te digo si me despiertan por la noche, se me pasan por la cabeza todo tipo de muertes lentas y dolorosas. En cambio, cuando les voy a dar el beso por la noche y están dormiditos en su cama, tranquilines, sin moverse, agarrados a su peluchín, siento que les quiero más. Sin embargo les quiero siempre, cuando están pasados de rosca y cuando están adorables.
Con el perico pasa lo mismo. Esas maripositas se van volando y muchas veces lo que nos salen son truenos y relámpagos. Pero después de la tormenta siempre llega la calma.
A veces el ciclo de vida de estos insectos va al revés,  primero mariposa que revolotea haciendo cosquillitas y luego pasa a ser gusano de seda que apenas se mueve ni se nota pero, que está ahí, aunque es un capullo. (Tómatelo como quieras)
¿Estoy siempre adorable, fantástica y monísima? Yo no. De hecho tengo doble personalidad, cuando duermo  y cuando no. Pero los demás no tienen la culpa.
Hay que querer querer.  Quiero a mi espos@ aunque sienta o no sienta,  aunque este guapo o feo, aunque huela a Hugo Boss o a sudor… me comprometo a esforzarme por quererle siempre, por querer quererle.
Es curioso lo que aguantamos a los hijos. Solo hay que ver Hermanos mayor;  aguantan insultos, incluso que les peguen y roben y en  cambio al maromo a la mínima de cambio lo apunto en la lista de agravios. “Es que es mi hijo y lo quiero por encima de todo”
¿Entonces a tu marido sólo lo quieres en algunas circunstancias? Si tienes hijos él tendrá algo que ver ¡digo yo! Qué motivo más grande que ese para quererle hasta el infinito y más allá. Cuanto más le quieras a él más querrás a tus hijos.

Categorías
Unaporuna

Los secretos de una madre…

Tengo muchos post pendientes de contaros, pero he vuelto a meter la vida en una maleta y no consigo robarle más horas al sueño para escribir, pensar, publicar…

Esta foto es del viaje que hemos hecho este verano mi madre y yo. Un viaje que recomiendo a todo el mundo, no tanto por el destino, sino por el PLAN. Mamá y yo solas. Nadie más. Y encima sin cobertura. Os prometo que os lo contaré pronto.

Pero el post de hoy es de un artículo que leí hace tiempo y me apetece compartirlo.

«Nuestras madres están siempre para nosotros ahí y pareciera que no tienen otro interés en la vida, sino el hecho de que siempre estemos y nos vaya muy bien. Olvidamos rápidamente que nuestra madre es también un ser humano con su propia vida, sueños y deseos, que su amor por su hijo es demasiado grande y que cuida de él hasta el punto de olvidare de ella misma.
Ha llegado la hora de bajar el telón y revelar los “pensamientos secretos”, que una madre tiene con su hijo.

1.Tu eres el motivo del porque ella ha llorado tanto.
Ella lloró de alegría, cuando experimentó tu embarazo. Ella lloró por tener suerte cuando entre sus brazos te pudo tener. Ella lloró por preocupación, cuando tú no te encontrabas bien. Y con orgullo, cuando diste tus primeros pasos y por todo lo que en tu vida aconteció.

2. Ella también quería ese último trozo de pastel.
«Pero claro mi amor», dijo ella al notar que tú aún no estabas del todo satisfecho/a . «Es todo para ti» dijo; dejando ese último trozo y renunciando a él para que tú estuvieras no pasaras más hambre. Pero no solamente con un pastel ocurrió esto, sino renunciando también a mucho más en su vida.

3. Siempre se preocupó por ti.
Antes de tu nacimiento, ella lo preparó y entregó todo para que a ti nada te ocurriera. Cuando tu llegabas tarde a casa, ella estaba despierta aún esperandote. No se quería molestar contigo, solo quería saber si estabas bien.

4. Aunque ella sufrió dolores. Siempre los tiene de nuevo contigo.
En tu nacimiento soportó un gran dolor, uno de los más fuertes que una mujer puede experimentar. El 9 mes no fue tampoco nada fácil. Después tú, con tu tierna boca la mordías cuando te amamantaba y también la pateabas. Pero con una sonrisa tuya a ella le bastaba para que el dolor desapareciera.

5. Ella no es perfecta.
Tal vez ella se estresaba solo porque se preocupaba por ti. Tal vez ella no lo hacía «todo» siempre bien como tu lo querías. Pero ella dió lo mejor de sí en cada ocasión y se hacia duras autocríticas por no ser mejor para ti.

6. A ella le gusta observarte.
Es increíblemente difícil para ella quitarte los ojos de encima. Cuando te dormiste finalmente después de esa larga noche de insomnio y luego despertaste a la mañana siguiente con una sonrisa al ver su rostro. Este momento siempre lo llevará en su corazón.

7. Cuando lloraste, parecía que el mundo se iba a acabar.
Cada lágrima o sollozo que tu emitías, era para ella como una punzada directo en su corazón. Y no había nada más importante en ese momento que tomarte entre sus brazos y consolarte hasta que estuvieras bien nuevamente.

8. Desprenderse de ti es casi como perderte.
Ella sabe desde el principio, que tú construirás tu vida paso a paso, tu primer amor, tu primer apartamento, no importa qué, cada uno de estos pasos es difícil también para ella. Pero lo más dificil será para ella, aceptar que ya puedes volar solo y hacer tu propio camino, sabiendo que no te tendrá cerca las 24 horas del día.

9. Ella lo volvería a hacer.
A pesar de cualquier dolor y/o las carencias que hayan venido, siempre la alegría y el amor fueron mucho más grandes e importantes para ella y eso fue lo que te entregó. Es por esto que ella volvería a pasar por todo esto nuevamente, dolor, sufrimiento, agotamiento y lo que fuera necesario para que estuvieras bien. Todo por que ella te quiere sobre todas las cosas.

Ella, es la MEJOR MAMÁ del mundo, y la mejor ABUELA…


Categorías
Unaporuna

Te estamos esperando…ISABEL

Esta semana está siendo más de emociones que de otra cosa, y aunque hoy queríamos contaros un plan de viaje muy chulo, lo reservamos para la semana que viene, y le dedicamos este post a nuestros primos, que si Dios quiere, hoy serán papás.

 
 
El texto se refiera a un hijo, y en este caso será una hija, pero en cualquiera de los dos, creo que el sentimiento es el mismo.
 
Hoy estamos toda la familia muy nerviosa, esperando noticias, y encendiendo una velita para que sea una horita corta.
 
Y a ti, pequeña, ya te dedicaremos un post entero (que aquí a todo el mundo le gusta que le dediquemos uno 😉 pero antes de que revoluciones la vida de todos, decirte que te prepares para todo lo que vas a vivir, porque el mundo de los mayores es caótico, pero también es increíble.
Y te mereces aprovecharlo desde hoy hasta siempre.
 
Ah, y por favor, que seas pequeñita y te quepa toda la ropita que te ha hecho tu abuela 🙂
 
Has tenido la gran suerte de tener una familia increíble. Disfrútala.
 
Te estamos esperando, ISABEL.
 

Categorías
Inspiración Unaporuna

Viernes = Inspiración

Y el final…ya nos lo podemos imaginar todos…
 
FELIZ FIN DE SEMANA!
Categorías
Unaporuna

Seguimos emocionadas…

 
Hoy os quiero enseñar la reflexión más bonita que he leído desde hace mucho tiempo, sobre el amor de una mamá a su hijo…
 

Nunca nos arrepentiremos:

“Estamos haciendo una encuesta”, dice medio en broma.

“¿Crees que deberíamos tener un bebé?”

– “Vuestra vida va a cambiar”, digo cuidadosamente y manteniendo mi neutralidad.

– “Lo sé”, me contesta. “Se acabaron las fiestas nocturnas los fines de semana, las vacaciones espontáneas…”

Pero no me refería a eso en absoluto. Miré a mi hija tratando de decidir qué decirle.
Me gustaría que supiese lo que no va a aprender en las cases de preparación al parto.
Me gustaría decirle que las heridas físicas tras el parto se curan, pero convertirse en madre conlleva una serie de heridas emocionales a la que siempre será vulnerable.

Pienso en decirle que nunca volverá a leer el periódico sin preguntarse después ¿Qué hubiera pasado si ese hubiera sido mi hijo?. Que cada accidente de avión, cada incendio serán su obsesión. Que cuando vea las fotos de niños hambrientos, ella siempre se preguntará si podría haber algo peor que ver a su hijo morir.

Miro sus uñas cuidadosamente pintadas y su elegante traje. Después pienso que no importa lo sofisticada que sea, ya que cuando se convierta en madre adquirirá el nivel primitivo de una osa que vela por su cachorro. Que una llamada urgente de “¡mama!” hará que deje caer la tarta que esté preparando o su figura de cristal favorita sin vacilar ni un instante.

Siento que debo advertirle, pues no importan todos los años que haya invertido en su carrera profesional, pues verá las cosas de otro modo con la maternidad. Podría dejar todo listo para que alguien se encargue del pequeño mientras acude a una reunión de negocios, pero seguirá pensando en el olor de su bebé. Tendrá que hacer gala de una disciplina de hierro para no acudir a casa, solo para ver que su bebé se encuentra bien.

Quiero que mi hija sepa que tomar decisiones ya no será una cuestión de rutina. Que el deseo de un niño de 5 años de entrar al baño masculino para hacer sus necesidades se convertirá en un gran dilema. Que justo allí, en mitad de la gente con bandejas y niños gritando a pleno pulmón, los temas de la independencia y la identidad de género serán sopesados contra la perspectiva de que un abusador esté acechando en ese baño.

En cuanto a mi atractiva hija, quiero asegurarle que en un futuro conseguirá perder los kilos del embarazo, pero que nunca se sentirá igual consigo misma. Que su vida, ahora tan importante, tendrá menos valor después de tener un hijo. Empezará a desear vivir más años, no para cumplir sus propios sueños, sino para ver a sus hijos lograr los suyos. Quiero que sepa que las estrías o una cicatriz de cesárea se convertirán en insignias de honor.

La relación de mi hija con su marido cambiará, pero no de la manera que piensa. Deseo que pudiera entender cuánto se puede llegar a querer a un hombre que cambia los pañales del bebé o que nunca le asaltan las dudas para jugar con sus hijos. Creo que debería saber que seguirá enamorándose de él por razones que ahora encontraría muy poco románticas.

Me gustaría que mi hija se diese cuenta de lo ligada que se sentirá a aquellas mujeres históricas que trataron de detener la guerra, los prejuicios y conducir borracho.

Quiero describirle la euforia que se siente cuando ves a tu hijo aprendiendo a andar o a montar en bicicleta. Me gustaría capturar para ella las carcajadas de un bebé que toca la suave piel de un gato o un perro por primera vez. Quiero que saboree esa dicha tan real, que duele.

La mirada interrogativa de mi hija me hace darme cuenta de que las lágrimas se han empezado a acumular en mis ojos. “Nunca lo lamentarás”, digo finalmente. Entonces alargué mi brazo a través de la mesa y apreté la mano de mi hija.
 
Categorías
Inspiración Unaporuna

viernes=INSPIRACIóN

Si lo encuentras…
             FELIZ FIN DE SEMANA!!
Categorías
Unaporuna

Qué es el AMOR…? Los niños lo saben mejor que nadie!

Se acerca el día de San Valentín, y aunque nosotras no lo celebramos porque creemos que el Amor se demuestra a diario, sí que vemos un montón de ideas y post que nos gustan mucho.

Si te preguntasen, ¿Qué es para ti el Amor..?

Para mi, el AMOR es esto…

No son fotos buenas, ni con fondos blancos, ni siquiera retocadas… pero reflejan justo ese momento, en el que nos volvemos locos, los 2.

Ha salido un estudio en el que preguntan a niños de entre 4 y 8 años qué es el Amor para ellos; aquí, algunas de las respuestas más sinceras…

«Cuando mi abuela padecía de artritis, ella no podía agacharse para pintarse las uñas de los pies, de manera que mi abuelo se las pintaba todo el tiempo, aún cuando sus manos tenían también artritis, eso es Amor». Rebecca – 8 años

» Cuando alguien te ama, la forma como ellos dicen tu nombre es diferente». Billy – 4 años

«Amor es cuando una chica se pone un perfume y el chico usa colonia de afeitar y entonces ellos se huelen el uno al otro». Karl – 5 años

«Amor es cuando tu vas a un lugar a comer y terminas dándoles tus papitas fritas a alguien sin pedirle que termine dándole las suyas». Chrissy – 6 años
«Amor es cuando Mamá hace el café para Papá y ella toma un sorbo antes de dárselo para estar segura de que esta bueno» Danny – 7 años

«Amor es cuando se besan todo el tiempo, entonces, cuando se cansan de besar, todavía siguen juntos solo para hablar. Papá y Mamá les gusta hacer eso» Emily – 8 años

«Amor es cuando tú le dices a un chico que te gusta su camisa y entonces él no se la quita en todo el día» Noelle – 7 años

«Amor es cuando una mujer un poco vieja y un hombre un poco viejo son todavía amigos aunque se conocen muy bien el uno al otro». Tommy – 6 años

«Durante mi recital de piano yo estaba muy asustada y nerviosa y entonces miré al público y vi a mi papá en el auditorio, me saludó con la mano y sonrió y ya no estuve más asustada». Cindy – 8 años

» Mi Mami me ama más que nadie. Tú no veras a nadie más besándome antes de dormir» Clare – 6 años

«Amor es cuando Mami le da a Papi la mejor presa de pollo» Elaine- 5 años

«Yo se que mi hermana mayor me ama porque ella me da sus vestidos viejos y sale y compra unos nuevos para ella» Lauren – 4 años

«Amor es cuando Mamá ve a Papá en el baño y ella no piensa que el es gordo» Mark – 6 años

Esta última pasa mucho…jajaja

y AMOR es…cuando tu sobrino de sólo 1 añito, te ayuda a secarte el pelo, porque tú lo odias…

¿Y para vosotros, qué es el AMOR?